Por Elvia Gómez (KonZ).- El diputado José Guerra responsabiliza de la crisis económica del país al ex ministro Jorge Giordani. “En el segundo lugar están peleando, cabeza a cabeza, Nelson Merentes y Rafael Ramírez. Esos son los tres mosqueteros del desastre económico, por acción y por omisión”. Afirma que si llegara a instaurarse en Venezuela un régimen militar no tendría ningún problema en conseguir financiamiento. “Un régimen militar puede tener problemas con algunos multilaterales que tienen cláusulas democráticas, pero no con la banca privada”.
Por Elvia Gómez @ElviaGomezR.- El economista José Guerra afirma que los dos países que han sufrido más los efectos del populismo y del mal manejo económico en Latinoamérica, “y tal vez en el mundo”, son Argentina y Venezuela. Cree que cuando se produzca un cambio político, la palanca económica será el petróleo y, además, el turismo y la industria. “Vamos a estar claros: La recuperación del petróleo en Venezuela no va a pasar por PDVSA, va a pasar por las compañías privadas nacionales y extranjeras”. Dice que PDVSA se ha transformado en “un foco de corrupción”. “Se calcula que de las compras y la procura de los proyectos petroleros, todos tienen un sobreprecio del 30%”.
-Cuando se postuló para diputado, ¿Qué expectativa tenía de su papel?
-Ahí sí estuve en lo correcto, yo sabía que iba a jugar este papel. En la legislatura anterior, salvo Alfonso Marquina (PJ-Lara), Omar Barboza (UNT-Zulia), Rafael Guzmán (PJ-Miranda) y Elías Matta (UNT-Zulia), los que opinaban de la materia económica y financiera eran muy pocos. Este no es el Parlamento de antes, donde no había expertos. Yo sabía que por mi experiencia iba a jugar este rol.
-Con las limitaciones que sufre el Parlamento, se le quedarán ideas en el tintero.
-La legislatura dura cinco años. No sé si yo voy a estar ahí los cinco años, pero de lo que sí estoy seguro es que las opiniones que he dado ahí las hago con la mayor fundamentación posible. Yo no improviso. Todas mis intervenciones son preparadas y creo que he inaugurado un estilo en la Asamblea Nacional, que es el uso de gráficas y figuras para explicar las cosas porque yo sé que así se le llega al gran público que es al que le interesa esto. Por ejemplo, el debate sobre el Decreto de Emergencia Económica fue prácticamente una cadena nacional y me tocó explicar cuáles eran los fundamentos de ese decreto.
-Usted coordinó con Omar Barboza el plan con las 10 propuestas para salir de la crisis económica que la AN le encomendó a una comisión especial, ¿Dónde se enfocaron?
-Nosotros consultamos a especialistas, invitamos a la gente del Gobierno que tiene algo qué decir, pero no fueron. Invitamos a Rodrigo Cabezas, lamentablemente ese día no pudo asistir. La idea del plan era elaborar unas orientaciones sobre qué hacer y de allí salieron las diez propuestas con los elementos fundamentales, como la unificación cambiaria. Eso hay que hacerlo, cada vez quedan menos dudas. Con un tipo de cambio a 10, otro a 650 y otro a 4.000 bolívares, cómo se calculan costos, salarios, precios. Luego, está el tema de la inflación, con esta tasa de 600% o lo que fuere, no hay manera de hacer ningún cálculo. ¿Cuánto son los costos? No se conocen las cifras, y cuando se conocen son tan altas que dislocan la economía. Luego está el problema de la producción petrolera. Venezuela está ahorita en una onda de reducir la producción cuando lo que hay que hacer es subir la producción. Coyunturalmente se baja porque la OPEP acuerda la disminución, pero el país que tiene las reservas de petróleo más grande del mundo occidental está produciendo mucho menos. Lo otro es la producción nacional que tiene que ver con la Ley de Fomento e Incentivo a la Producción Nacional. Todo esto está cada vez más vigente. El Gobierno no hizo caso a estas propuestas, pero hubo una medición de una encuestadora donde se les preguntó por la propuesta y más del 70% de las personas dijeron estar de acuerdo.
-Fue Datincorp. Decía que el 83% de los chavistas y el 90% de los opositores apoyaban ese plan.
-Esa. A la gente le parecía razonable el plan.
-¿Ha tenido oportunidad de contacto con los organismos multilaterales? ¿Qué expectativas tienen sobre el país?
-No con los multilaterales, que son el FMI, el BM, el BID y la CAF, pero sí con los bancos de inversión.
-Por ejemplo…
-Bueno… varios, varios. Lo llaman a uno y le escriben. Hoy (miércoles) me invitaron, lo que pasa es que yo no soy de esos de estar en cenas y almuerzos. Eso no va conmigo. Ellos tienen más información de la que uno pueda imaginar. La preocupación de la banca internacional es que el Gobierno pague la deuda, ellos tienen una cartera de clientes a los cuales les hacen reportes y su problema es si el Gobierno paga o no paga.
-¿No les importa la naturaleza del Gobierno, si es democrático o no?
-No, no les importa. Al que está en un fondo de pensión en Delaware o Chicago que tienen bonos de Venezuela no le interesa la naturaleza del Gobierno, lo que les interesa es que su plata les llegue el 15 y último. Es así, ¡Es así! Le puede interesar a algunos analistas que tienen sensibilidad, que vienen acá, que son venezolanos. Aquí no hay códigos morales, para eso están otras instituciones, pero no los bancos.
-¿En la hipótesis de que llegara a instaurarse aquí abiertamente un régimen militar podría conseguir dinero de la banca internacional sin problemas?
-Si les paga la deuda y hace bien las cosas desde el punto de vista macroeconómico no tendría ningún problema. Un régimen militar puede tener problemas con algunos multilaterales que tienen cláusulas democráticas, pero no con la banca privada.
-¿Y cuál ha sido el porcentaje de financiamiento hasta ahora del chavismo con respecto a la banca de inversión y multilaterales?
-Su principal sostén ha sido la banca privada y China. El Gobierno hasta 2011 ha tenido dinero básicamente de la banca internacional, las últimas colocaciones de bonos se hicieron en 2010. La deuda con la CAF y el BID son montos muy pequeños. Con el FMI y el BM no tiene.
-¿Cuándo es el próximo pago grueso de deuda?
-En diciembre hay que pagar como 80 millones de dólares y en el primer cuatrimestre de 2017 hay un pago fuerte de unos 3.000 millones de dólares.
-¿De dónde saldrá ese dinero?
-No sé. Del flujo petrolero que pueda venir y también parte de las reservas del BCV, que es lo que ha venido pasando, que han venido bajando para pagar la deuda.
-El Gobierno decía esta semana que aspira subir las reservas con oro artesanal.
-Eso es una estupidez. El oro para que sea reserva tiene que pasar por el Good Delivery, certificarse. Piensan que explotando oro y acabando con Guayana van a aumentar las reservas y eso no es verdad. Las reservas van a aumentar cuando el país exporte más productos de todo tipo, no con oro. Además, ellos destruyeron a Minerven.
-¿Qué responsabilidades se derivan de que el Gobierno haya puesto a gente tan mal preparada al frente de áreas neurálgicas para el país?
-Aquí cuando esto pase habrá que hacer una especie de Juicios de Núremberg en materia económica. El daño que se le ha hecho a la economía al haber manejado esta enorme cantidad de dinero con unos resultados tan pobres. Eso va a ser un juicio moral que no sé si pueda llevarse a responsabilidades administrativas. El daño es incuantificable. Hay varios responsables, (Jorge) Giordani es uno. En el segundo lugar están peleando, cabeza a cabeza, (Nelson) Merentes y Rafael Ramírez. Esos son los tres mosqueteros del desastre económico que tiene Venezuela. Ellos, por acción y por omisión.
-En el caso de Ramírez, sobre quien el TSJ ordena que no se le siga investigando, ¿Qué conocimiento tiene de su responsabilidad en el caso de PDVSA?
-No es él solo, es Rafael Ramírez con la directiva de PDVSA. Ellos son culpables del desastre de una industria incapacitada para aumentar la producción petrolera, con una nómina recargada. PDVSA produce 30% menos barriles de petróleo que en el año 1998 y tiene seis veces más empleados que en el 98. La caída de la producción es más de 10% en lo que va de año, estamos hablando de 300 mil barriles menos en 2016. Además, tenía una deuda de 4 mil millones de dólares y ahora debe 70 mil millones. La destrucción de PDVSA no se veía porque el precio del petróleo estaba alto. Ahora andan desesperados buscando acuerdos con las compañías operadoras para pagarles la deuda y tratar de que inviertan acá, porque PDVSA no tiene un centavo. Todos los dólares de PDVSA son para pagar la nómina y su deuda. Ahora con el agravante de que quien está pagando el gasto interno en bolívares de PDVSA es el BCV.
-¿Dónde nos pone eso respecto de otros países? ¿Cerca de Haití?
-No, no, Venezuela no se puede comparar con Haití nunca. Venezuela tiene todavía reservas petroleras para 200 años. Tiene una capacidad productiva muy disminuida, pero la tiene. Tiene un capital humano, aunque en fuga. El orden era: Brasil, México, Argentina y Venezuela. Ya nos pasó Colombia hace rato y Perú ya no alcanzó. Nosotros somos un país en decadencia como lo fue Argentina. Los dos países que han sufrido más los efectos del populismo y del mal manejo económico en Latinoamérica, y tal vez en el mundo, son Argentina y Venezuela.
-¿En cuánto tiempo se pudiera ver luz a partir de que se produzca un cambio político?
-Si se hacen las cosas bien, creo que en un año se empiezan a ver las mejoras, porque estamos tan mal que cualquier cosa que hagamos bien se va a ver como algo favorable.
-¿Qué sería lo primero que la gente notaría?
-Lo primero es decirle a la gente: Usted va a trabajar y el Gobierno no lo va a obstaculizar. ¡Trabaje! Y que se acabe esa perseguidera de este ejército de burócratas queriendo controlarlo todo.
-¿Luego?
-Algunas medidas macroeconómicas. Hay que ir a un nuevo plan petrolero para aumentar la producción.
-¿Y el personal para eso? ¿Invitarían a los expulsados de PDVSA a regresar?
-Unos van a volver y otros no regresarán nunca. Pero básicamente serán las nuevas generaciones. Y vamos a estar claros: La recuperación del petróleo en Venezuela no va a pasar por PDVSA, va a pasar por las compañías privadas nacionales y extranjeras que van a invertir.
-¿Cuáles reformas habría que acometer para que eso sea atractivo para los privados?
-Reglas del juego claras, otro régimen fiscal y que la gerencia y gestión de los proyectos no los maneje PDVSA. Ese es un foco de corrupción. Se calcula que de las compras y la procura de esos proyectos petroleros, todos tienen un sobreprecio del 30%. La nación es la dueña del petróleo, pero debe haber libertad para que la gente trabaje porque si no se queda la riqueza en el subsuelo.
-Con las nuevas tecnologías y fuentes energéticas es mayor el peligro de que esos 200 años de reservas se queden allí, como lo advirtió el jeque (Ahmed Zaki) Yamani con aquella famosa frase sobre el fin de la era de piedra.
-El petróleo va para una zona de peligro, eso está clarísimo. La demanda está bajando y básicamente EE.UU. va a la independencia petrolera, ya es el primer productor de gas del mundo y está aumentando a razón de 800 a 600 mil barriles diario/año de petróleo. Europa está consumiendo mucho menos petróleo porque es mucho más eficiente en el uso de los combustibles, hay carros a gas, eléctricos. Y lo otro es China, que también anda en un plan de quitarse la dependencia petrolera del Medio Oriente. Cuando uno pone todo esto en contexto y ve lo que están haciendo las compañías petroleras como Aramco, BP, Shell o ExxonMobil, uno ve que las compañías se están transformando en energéticas, no petroleras. La tendencia es hacia una menor importancia del petróleo crudo en los años próximos.
-¿Cuál sería el segundo renglón que podría producir ingreso rápidos al país?
-La industria. Y tenemos potencial en turismo, pero tenemos unos competidores muy fuertes con las islas del Caribe. Pero nosotros tenemos otras capacidades industriales que podemos explotar con una política orientada hacia el mercado internacional.
-¿Cuál genera más empleo en menor tiempo?
-El turismo, sin duda. El entrenamiento de la gente es más básico, el servicio es más fácil que manufacturar un producto.
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