China aprovecha esa especie de ausencia de los Estados Unidos de la región en estos tiempos de pandemia. Donald Trump anda en otro mundo. En uno que se ha inventado. Pero Xi Jinping, sonrisa de individuo paciente que toma oportunidades sin apariencia agresiva, anda por el orbe haciendo uso del poder blando. Europa tampoco es competencia para China. Europa sufre su propia crisis sanitaria y económica. De modo que China se despliega por Europa misma, ayuda a Europa y a Rusia, a Africa, y ha hecho de América Latina una prioridad. América Latina de la que se pronostica que será el centro de la pandemia dentro de poco. De hecho, Brasil tiene problemas, México también, incluso Chile, no se digan Ecuador y Perú.
Los titulares de la agencia Xinhua no pueden ser más elocuentes:
Chile recibe donación de insumos médicos de personas y empresas chinas.
China y países caribeños fortalecerán cooperación en lucha contra COVID-19.
Provincia china dona materiales antiepidémicos a Lavalleja en Uruguay.
ESPECIAL: Tecnología de China potencia respuesta de Argentina contra COVID-19.
ESPECIAL: Personas inscritas a programa social en Brasil fabrican mascarillas con máquinas donadas por China.